viernes, 20 de septiembre de 2013

Epic: El mundo secreto

Muy buenas a todos, ya seáis lectores consumados o efímeros de este mi humilde blog. Hoy les voy a dar mi opinión sobre una película que está bastante bien y a la que infravaloré en un principio, lo cual fue un acierto porque disfruté mucho en la sala del cine pero a la vez un error porque no atiné con las predicciones.


"Epic" está basada en la existencia de seres diminutos, los cuales se hallan en medio de los preparativos para la ceremonia de elección de la sustituta de la reina del bosque actual... o para la destrucción de todo lo que conocen hasta ahora. Todo depende de en qué bando de las fuerzas de la naturaleza nos situemos. En un claro del mismo vive el padre de Mary Katherine, la cual por un azar del destino se vuelve diminuta y debe ayudar a los hombres hoja (los buenos) a salvar su hogar.

La historia de original tiene poco, eso os lo he de conceder (recordemos si no FernGully y sus secuelas), sin embargo, sí es verdad que entretenida es un rato y en muchas ocasiones resulta muy graciosa. Hace mucho que no presenciaba una película de animación que pudiese ofrecer verdadera diversión a los más jóvenes y a los que ya no lo somos tanto. Me quedé gratamente sorprendida.


Todos los personajes son buenos y hasta el antagonista tiene cierto carisma. Se adaptan bien a la historia y ninguno de ellos cae en el absurdo de cometer ninguna gilipollez estrepitosa o de ser demasiado cerrado en su carácter (espero que a partir de ahora dejen de cometer esas bobadas y este sea el inicio de una era inteligente). Sin embargo una servidora siente cierta debilidad por los más chistosos, que en este caso son:

Mub y Grub, un caracol y una babosa que sirven tanto para ayudar a los protas como para ser los mejores bufones que cualquier corte pudiese solicitar.

Ozzy, ese gran perro incomprendido de tres patitas que salva el día con cabriolas extrañas y lametones cariñosos pero peligrosos :D.
La banda sonora está bien, pero no es nada del otro mundo. Lo que sí llega a ser sorprendente es la calidad de las animaciones, lo que hace que una se replantee la posibilidad de que en un futuro no muy lejano la ficción apenas se distinga de la realidad. Los detalles están muy cuidados, tanto a nivel de movimientos como de gráficos en sí, y es una verdadera delicia contemplar esta película.

Si no tenéis dinero para verla en la sala de cine más cercana (que no estamos precisamente en épocas de bonanza) lo que bien se puede hacer es esperar un poco más, pero una cosa está clara: la tenéis que ver, porque es bastante buena. Muchas gracias por la atención. Nos vemos en la próxima entrada o en la caja de comentarios.

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